Arthur Fils, el mejor clasificado de Francia, abandonó el torneo antes de su partido programado de tercera ronda, citando una fractura por estrés en la zona lumbar. El joven de 20 años, cabeza de serie número 14, se retiró el viernes antes de enfrentarse al ruso Andrey Rublev.
Rublev avanzó a los octavos de final por abandono y podría enfrentarse al número 1 del mundo, Jannik Sinner, en la siguiente ronda. Fils reveló que, tras una dura batalla en un partido de cinco sets contra Jaume Munar, durante el cual el dolor en su espalda empeoró, las pruebas médicas confirmaron la lesión, lo que le llevó a la difícil decisión de dejar la competición.
Fils explicó que el problema en la espalda le venía molestando desde hace tiempo y se agravó durante el partido contra Munar, donde también sufrió calambres. Reconoció que el apoyo del público local en la pista Suzanne Lenglen le ayudó a terminar ese duro encuentro, pero seguir jugando podría haber prolongado el tiempo de recuperación. Ante la posibilidad de estar fuera entre cuatro y seis semanas, Fils y su equipo decidieron priorizar su salud para evitar una ausencia prolongada del deporte.
A pesar del revés, Fils mantiene la esperanza de competir en Wimbledon más adelante este año, donde anteriormente llegó a los octavos de final. Sin embargo, admitió que no está seguro del tiempo que tardará en recuperarse. Esta retirada se suma a una temporada complicada para el joven parisino, quien también se vio obligado a retirarse del Abierto de Australia a principios de año por una lesión en el tobillo. Su ausencia prolonga la espera de Francia por un campeón masculino en Roland Garros desde la histórica victoria de Yannick Noah en 1983.
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