Aunque la última temporada futbolística del Manchester United fue decepcionante en lo deportivo, su desempeño financiero sorprendió a Wall Street. El histórico club inglés terminó en el puesto 15 de la Premier League —su peor posición en más de cincuenta años— y perdió la final de la Europa League ante el Tottenham. Sin embargo, a pesar de estos malos resultados en el campo, las acciones del club se dispararon un 18,8% en la Bolsa de Nueva York tras un informe financiero del primer trimestre de 2025 que superó las expectativas.
Según el reporte, el United registró una pérdida neta de £2.7 millones en los tres meses hasta el 31 de marzo, una mejora notable del 96% respecto a la pérdida de £71.5 millones del mismo período del año anterior. Además, el club elevó su pronóstico de ganancias anuales antes de impuestos y deducciones a un rango de £180–190 millones, superando la estimación anterior de £145–160 millones.
Los ingresos aumentaron más de un 17%, alcanzando £160 millones, destacando un incremento del 50% en ingresos por días de partido, impulsado por ventas de productos oficiales y asociaciones comerciales. Al mismo tiempo, los gastos operativos bajaron un 20% y los costos de nómina se redujeron un 22%.
La reducción de los gastos salariales se debió principalmente a las cesiones temporales en enero de Marcus Rashford, Jadon Sancho y Antony. Aunque no disputar la Liga de Campeones limitó los ingresos potenciales, también alivió las obligaciones financieras en bonificaciones y sueldos. Pese al repunte financiero, el United aún no ha logrado volver a la rentabilidad total desde el inicio de la pandemia y no participará en la competición europea de élite la próxima temporada.
La estructura de propiedad del club, ahora compartida entre la familia Glazer y el multimillonario británico Sir Jim Ratcliffe, también ha sido objeto de atención. Ratcliffe, quien adquirió una participación y asumió el control del área deportiva a inicios de 2024, introdujo diversas medidas de reducción de costos, como despidos y eliminación de beneficios laborales.
Aunque estas acciones han fortalecido las finanzas del club, también han generado descontento entre los aficionados y empleados. Para generar nuevas fuentes de ingresos, el equipo emprendió una gira comercial por el sudeste asiático, con paradas en Kuala Lumpur y Hong Kong, en busca de consolidar su presencia global.
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