La decisión llega luego de la polémica generada por el penal anulado a Julián Álvarez en el duelo de la Liga de Campeones entre Atlético de Madrid y Real Madrid. El argentino convirtió el gol, pero el VAR anuló la jugada al detectar que había tocado el balón dos veces de forma no intencionada tras resbalarse, lo que influyó directamente en la eliminación del Atlético y desató una ola de críticas por la rigidez del reglamento.
Con la actualización del Artículo 14 de las Reglas de Juego, ahora se establece que si un jugador toca el balón dos veces de manera accidental —como al resbalarse— y el balón entra, el penal debe repetirse. Si no entra, simplemente se considera como fallado. La nueva norma busca distinguir claramente entre infracciones deliberadas y errores fortuitos, garantizando mayor equidad en situaciones de alta presión.
En un comunicado oficial, el IFAB explicó que la intención es evitar castigar a los jugadores por circunstancias fuera de su control, al tiempo que se evita premiar acciones irregulares no intencionadas. La organización subrayó que el espíritu de la norma nunca fue penalizar a un futbolista por perder el equilibrio durante la ejecución.
Atlético de Madrid ha recibido con buenos ojos la modificación, aunque sostiene que en el caso de Álvarez hubo un error arbitral. El entrenador Diego Simeone argumentó que el movimiento del balón fue mínimo y no hubo infracción clara. Tras el anuncio del IFAB, un portavoz del club expresó una aceptación cautelosa, afirmando que aunque todavía consideran errónea la decisión, valoran la disposición de los organismos rectores a corregir y aprender de lo sucedido.
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