A pesar del revés, los tres veces campeones de África conservaron su estructura y amenazaron la defensa de Egipto con balones largos y movimientos rápidos por el centro. Nigeria mostró peligro en jugadas a balón parado y, en tiempo de compensación, el defensor Zaidu Sanusi centró para que Chidozie Awaziem anotara el gol del empate.
En la segunda mitad, los Super Eagles cambiaron a una formación 4-4-2, incorporando al portero Amas Obasogie junto a Ademola Lookman, Cyril Dessers, Semi Ajayi, Bruno Onyemaechi y Tochukwu Nnadi. La posesión estuvo equilibrada, pero Egipto marcó nuevamente desde una posición aparentemente en fuera de juego. Nigeria protestó, pero el árbitro validó el gol.
Los Faraones retrocedieron a su propio campo, frustrando múltiples ataques nigerianos. El técnico Éric Chelle recibió tarjeta amarilla tras disputar varias decisiones arbitrales, incluida una mano dentro del área egipcia que no fue sancionada.
A pesar de la derrota, el desempeño de Nigeria mostró resiliencia y potencial ofensivo prometedor de cara a la fase de grupos de la AFCON.
Los Super Eagles viajarán a Fez el jueves para sus partidos del Grupo C contra Tanzania, Túnez y Uganda, mientras que Egipto se dirigirá a Agadir para los encuentros del Grupo B contra Sudáfrica, Angola y Zimbabue.
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