Aunque no parten como favoritos para el enfrentamiento del sábado, su camino hacia Múnich ha demostrado que siguen siendo un equipo temible. Bajo la dirección de Simone Inzaghi, el conjunto italiano ha superado expectativas con una plantilla experimentada y determinada, capaz de competir al más alto nivel frente a las potencias europeas.
Su recorrido hacia la final incluyó duros enfrentamientos contra el Bayern Múnich y una semifinal dramática ante el Barcelona, evidenciando la resistencia y disciplina táctica del Inter, a pesar de la veteranía de sus jugadores clave. Con una media de edad superior a los 30 años, futbolistas como Yann Sommer, Francesco Acerbi y Henrikh Mkhitaryan se han consolidado como referentes fundamentales del equipo.
Esta final representa más que la lucha por un trofeo: es una oportunidad de redención. En 2023, el Inter estuvo muy cerca de alcanzar la gloria, pero cayó por la mínima ante el Manchester City en Estambul. Inzaghi reconoció que aquella derrota fue una ocasión desaprovechada, ya que su equipo mostró un rendimiento igual al de su rival, a pesar de la diferencia de recursos.
Ahora, frente a otro gigante financiero como el PSG, el Inter tiene la posibilidad de escribir un nuevo capítulo en su historia. Inzaghi destacó el valor de la experiencia adquirida en la última final, aunque también reconoció la calidad del equipo parisino, que cuenta con campeones del mundo y un entrenador que ya sabe lo que es levantar la Liga de Campeones.
Los sueños del Inter de lograr un triplete esta temporada se desvanecieron en las últimas semanas, con tres derrotas consecutivas que afectaron su lucha por el título de la Serie A y los dejaron fuera de la Copa Italia, permitiendo que el Napoli tomara ventaja en ambas competiciones.
A pesar de ello, Inzaghi elogió la entrega de sus jugadores a lo largo de una temporada exigente de 59 partidos, afirmando que todos dejaron todo en el campo. El desgaste físico y mental del plantel veterano es evidente, pero la victoria en semifinales contra el Barça demostró que el deseo de triunfar en Europa sigue intacto.
A pesar de las limitaciones económicas y de un reciente cambio en la propiedad del club, el Inter ha logrado mantenerse competitivo. A diferencia del PSG, que puede realizar fichajes millonarios como el de Khvicha Kvaratskhelia, el club italiano ha apostado por contrataciones inteligentes y una fuerte cohesión interna.
Sommer, fichado por menos de 7 millones de euros, se ha convertido en una pieza clave, junto a refuerzos como Marcus Thuram y Benjamin Pavard. La mayoría del núcleo del equipo participó en la final de 2023, aportando una experiencia valiosa para este nuevo encuentro con el destino. Como resumió Sommer, la unidad y el coraje del grupo han sido la clave que los ha llevado de vuelta al escenario más importante del fútbol europeo.
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