Nigeria superó a Gabón 4-1 en la semifinal del jueves, con gol de Akor Adams, seguido de un tanto de Chidera Ejuke en tiempo extra y un doblete de Victor Osimhen. Por su parte, RD Congo sorprendió a Camerún con un gol de Chancel Mbemba en tiempo de descuento, asegurando su clasificación a la final por 1-0.
Los Leopards, bicampeones africanos en 1968 y 1974, buscan regresar a la Copa del Mundo tras una larga ausencia, mientras que los Super Eagles aspiran a su séptima participación desde 1994.
El equipo congoleño está dirigido por el francés Sébastien Desabre, de 49 años, con experiencia en el Wydad AC y en varios clubes del norte de África y Egipto. Nigeria es comandada por el franco-maliense Éric Sékou Chelle, de 48 años, invicto en sus últimos cinco partidos oficiales con los Super Eagles.
Chelle deberá afrontar la final sin su subcapitán Wilfred Ndidi, suspendido tras recibir su segunda tarjeta amarilla, pero contará con Raphael Onyedika o Frank Onyeka en el mediocampo, quienes reforzaron al equipo en tiempo extra contra Gabón.
En ataque, Victor Osimhen continúa destacándose y podría igualar el récord de goles de Rashidi Yekini con Nigeria. Otras opciones ofensivas incluyen a Ademola Lookman, Alex Iwobi, Samuel Chukwueze, Akor Adams, Chidera Ejuke, Tolu Arokodare y el veterano Simon Moses, con 90 partidos con la selección.
La RD Congo, liderada por su capitán Chancel Mbemba, cuenta con una defensa sólida y atacantes peligrosos como Cédric Bakambu, Meshack Elia, Samuel Essende y Fiston Mayele del Pyramids FC. Con Nigeria y Panamá siendo los equipos mejor clasificados entre las seis naciones en los play-offs intercontinentales, una victoria el domingo dejaría al ganador a un paso de asegurar su lugar en la Copa del Mundo.
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