En un momento histórico para el boxeo femenino, la irlandesa Katie Taylor volvió a imponerse sobre Amanda Serrano, logrando el triunfo en el tercer y último capítulo de una trilogía inolvidable. El combate tuvo lugar en el emblemático Madison Square Garden, con entradas agotadas, durante una cartelera compuesta exclusivamente por mujeres — un hecho sin precedentes en este escenario.
Dos jueces puntuaron la pelea 97-93 a favor de Taylor, mientras que el tercero marcó un empate 95-95. A diferencia de los enfrentamientos anteriores, que fueron más explosivos, este combate se desarrolló como una batalla táctica — un verdadero juego de ajedrez en el que la estrategia fue más importante que la agresividad constante.
Katie Taylor, campeona indiscutida del peso superligero, mostró toda su clase y experiencia a lo largo del combate. Aunque Serrano tuvo buenos momentos, especialmente en los asaltos seis y ocho, no logró mantener el ritmo. La estrategia tranquila y eficiente de Taylor, combinada con destellos de su calidad habitual, le permitió cerrar con fuerza y asegurar la victoria.
Al reflexionar sobre la trilogía, Taylor declaró: “Hicimos historia tres veces. Fue un privilegio compartir el ring con Amanda. Somos creadoras de historia para siempre.” La rivalidad entre ambas marcó una era en el boxeo femenino, con un total de 30 asaltos y una hora completa de enfrentamientos.
A pesar de la derrota, Serrano aceptó con deportividad el resultado y reconoció la superioridad de Taylor, admitiendo que su cambio de estrategia no fue suficiente. “Intenté algo diferente — trabajar con más inteligencia y no con más fuerza”, explicó. “Nos mantuvimos a la distancia, usando golpes largos y combinaciones, pero no alcanzó.”
Aunque menos intensa que sus peleas anteriores, esta última entrega fue igualmente cautivadora. Fue una contienda marcada por el respeto, la técnica y el legado. Con esta tercera victoria, Katie Taylor consolida su lugar como una de las grandes leyendas del boxeo.
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