El boxeador de 35 años fue ingresado como medida de seguridad tras un exigente combate de 12 asaltos, siguiendo el protocolo estándar para peleadores después de enfrentamientos duros. El promotor Ben Shalom confirmó que la estancia de Eubank en el hospital fue breve y se realizó únicamente para observación rutinaria, y que el púgil fue dado de alta el lunes.
Eubank logró una victoria por decisión unánime en un duelo cargado de energía en el estadio Tottenham Hotspur, con los tres jueces puntuando la pelea 116-112 a su favor.
El combate estuvo marcado por intercambios constantes, aunque sin un momento decisivo de nocaut. A través de las redes sociales, Eubank expresó su agradecimiento, destacando la importancia del evento y agradeciendo a los aficionados por su apoyo, calificándolo como una "experiencia única en la vida".
Añadiendo un matiz emotivo a la velada, Chris Eubank Jr. estuvo acompañado en el recinto por su padre, Chris Eubank Sr., con quien había estado distanciado. La pelea, disputada en el límite de peso medio de 160 libras, estuvo impregnada de legado y drama, reavivando una de las rivalidades más históricas del boxeo británico.
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