En el TD Garden, los Celtics ganaron 127-102, a pesar de estar abajo 3-1 en la serie al mejor de siete de las semifinales del Este y de la ausencia de su estrella Jayson Tatum, quien se perdió el juego por una lesión en el tendón de Aquiles que requirió cirugía. Derrick White lideró la ofensiva con 34 puntos, mientras que Jaylen Brown aportó 26 puntos, 12 asistencias y ocho rebotes. El entrenador Joe Mazzulla elogió la determinación de su equipo, destacando que realizaron las jugadas clave para extender la serie.
El quinto partido se disputará el viernes por la noche en Nueva York. Los Celtics necesitarán otra actuación sólida para continuar en carrera y buscar una remontada histórica. Su reciente rendimiento demostró resiliencia, incluso sin su jugador más importante, y reavivó la esperanza entre los aficionados.
En la Conferencia Oeste, los Timberwolves se impusieron 121-110 a los Warriors, cerrando la serie 4-1. Julius Randle fue el máximo anotador con 29 puntos, mientras que Anthony Edwards sumó 22 puntos y 12 asistencias en el Target Center. Ahora esperan al ganador de la serie entre Oklahoma City Thunder y Denver Nuggets, con Oklahoma liderando 3-2.
El técnico Chris Finch recibió elogios por la unidad y perseverancia de su equipo durante una temporada difícil, en la que no recurrieron a cambios de plantilla ni ajustes técnicos. Por su parte, los Warriors sufrieron por la ausencia de Stephen Curry, lesionado en el primer juego por una molestia en el muslo. El entrenador Steve Kerr reconoció que la salud y la ejecución oportuna suelen definir el éxito en playoffs, y felicitó a Minnesota por su logro.
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